Y llegó el verano.
Las chachas descansan sus cuerpos a la sombra de algún
edificio mientras se abanican con un pay pay de diseño…jejeje quedó muy de sexo en nueva York!!!.
Pero la verdad es que una chacha está en un pueblo del
inframundo y la otra en un lugar cuyo nombre no quiero acordarme.
Yo, la chacha cobaya, poco tengo que hablar de sexo, con la
llegada del periodo estival mi cuerpo se ralentiza convirtiéndose en un ser
cuya única meta durante el dia es comer, leer y hacer un poco de soffing , todo
eso aderezado con intensas horas mirando la pantalla del ordenador viendo las
actualizaciones del facebook cada minuto.
Y pensarán….uffff que aburrimiento, podría irse de viaje,
podría ir a la playa, o a dar un paseo….
Pero no, estoy en mi salsa. Vacaciones es sinónimo de
gandulear, ociosa y panzuda….feliz ¡¡¡FELIZ!!!
Ahora bien, no es oro todo lo que reluce y dentro de la
cobaya se mueven wind of change. Soy bastante promiscua (eso ya lo saben). Si mi materia humana no se mueve, mi mente sí, y suele hacerlo 10.000 veces más rápido que mi
hermoso y frondoso cuerpo bien alimentado.
Tengo la suerte de tener una gran imaginación, y poder pasar
horas muy divertidas yo conmigo, un dúo perfecto. Pajas mentales con seres de
otra galaxia cuyo aliento siento en mi oreja cuando por invitación se tumban a
mi lado en mi sofá sillón, olores lozanos y viriles que están lejos
de mi ajado corazón. Rituales de apareamiento con esos mismos seres que suelen
estar muy por encima de mis posibilidades. Personajes reales que se presentan
ante mí en cuerpo y alma, hablan se mueven y toman alimentos reales…pero que mi
mente los convierte en amantes feroces que me devoran, se lanzan sobre mí y me
toman por la fuerza sin preguntar. Aunque en otras ocasiones son seres con una
carga de inocencia y virginidad acentuada (eso sí , siempre pasando el límite
de la edad permitida por ley) . Y lo mejor de todo esto…o lo peor, según se
mire, es que comparto esas pajas habaneras con dos de mis amigos más preciados,
uno del sexo masculino y otro femenino.
Los tengo perturbados con mis historias pornográficas, con el cola-cao y
el sillón (tengo una fantasía sexual muy depurada, algún día la contaré...). Desde aquí aprovecho para pedirles disculpas.
¡Mente perturbada y masturbada!, pero una mente perfecta para estos dias de inactividad.
Aunque mi amigo "mas preciado" del sexo masculino, también me
trastorna con imágenes cochinas. Aventuras vividas por él, donde el sexo es el
protagonista absoluto, y como mi mente es muy perversa enseguida llena esos
recuerdos de él con olores, sabores y salivas (..todo muy sucio, ummm). Sus historias están llenas de rincones
oscuros, donde hombres se esconden para desahogar su fidelidad absoluta,
después de visitar los mejores puticlubs de la zona, como
sacrificio espiritual. Están llenas de mulatas hermosas que pasean sus cuerpos pecaminosos por los tugurios de una ciudad igualmente pecaminosa. Como podréis ver no me rodeo de las mejores influencias.
Ya voy sintiendo la necesidad de pasar a la acción, pero ya no sé como hacerlo. Entonces me
vuelvo al lugar de mi recreo, mi mente.
Temo que el verano me vuelva una especie de perezosa con legañas en los
ojos y la mirada perdida en las entrañas de mis pensamientos (…aunque creo que
siempre he sido esa perezosa con legañas en los ojos).
Lo cierto es que seguiré en este lugar de cuyo nombre no
quiero acordarme, sentada frente a mi ordenador, con una copa de vino y el
ventilador de los chinos hasta nuevo aviso.
El tiempo es cruel, no perdona a los seres más débiles. Y yo
no estoy para luchas insanas. Lo que tenga que ser, que sea. Siempre me quedará
mi vibrador, mi maravilla con pilas, suave y servicial, nunca se queja y
siempre repite. El único problema es que no da besos. Tiempo al tiempo, la
ciencia avanza muy deprisa.