lunes, 4 de junio de 2012

Gracias....De nada!!!!


Nada más triste que después de un polvo te den las gracias con un sms !!!!


Con esta frase podría terminar este artículo, pero voy a poner en situación a los lectores.

Una noche cualquiera en  una fiesta cualquiera. Lo normal, amigos, alcohol buena música….y de fondo una trama maquiavélica entre dos hombres….una trama de la que en cierta manera participé. Debo reconocer que me gustan los enredos, que me divierten mucho las conspiraciones y los tejemanejes relacionados con las cosas del amor y placer.
De buena gana entré de lleno en los envoltorios plastificados del me gusta, no me gusta. Eso sí, con discreción, de lejos, procurando que no se notara la mano inocente de una bruja con ansias de pasarlo tremendamente bien… JUAS JUAS JUAS!!!!!
Fin de la noche. Todo salió como lo habíamos planeado, bien hecho, me digo, ahora tengo via libre para acceder a mi premio, pues bien merecido me lo tenía…las batallas abren el apetito y el mío es especialmente insaciable.

Con el trabajo hecho y con la presa enfilada para merendar al día siguiente, me voy a mi guarida...
(...)
Aunque siendo sincera….ejem…tengo que reconocer que mis dientes se empezaron a afilar cuando por aquellos lares apareció ante mí un jamón de bellota. 
Por supuesto, la presa elegida por mí en esa trama maquiavélica de la que les he hablado, era de baja calidad, una carne más bien pobre, de tercera, pero cuando el hambre aprieta….

Y ante mí el JAMÓN JAMÓN  con su sonrisa estupenda y sus aires de no romper un plato, más interesante que un partido Madrid -Barsa , con esos aires de chico inalcanzable….ummmmm no hay nada más deseable que aquello que no puedes alcanzar. Desplegando todas mis armas (que no son muchas, porque la belleza es una de las que no me incluyeron en el lote el dia de mi nacimiento) zorreé un poco descaradamente, aún a sabiendas que nada iba a comer esa noche de pata negra.

Relamiéndome por aquello que no conseguí, pero con la expectativa de comer carne al dia siguiente me tumbé en mi lecho soñando con el banquete.

A la hora convenida apareció mi trozo de carne de tercera, yo con la cabeza más limpia y clara, con el apetito reducido por la falta de descanso y al ver la tarde que me esperaba, decidí que debía emborracharme de nuevo. La carne ya está comprada y no hay que tirar nada a la basura.

Ay de mi!!!!!!! Cuantas cruzadas "camales" tuve que soportar para poder saborear las mieles de la victoria. Muchas batallas perdidas, solo una ganada. Las artes amatorias son como las guerras, conquistar terreno, avasallar a los conquistados para luego someterlos a caprichos y tonturas de nuestro particular reino. Galopando sobre un terreno desconocido… gritos y sudores, ardores y fiebres, tanto esfuerzo por ganar algo que no quiero, un terreno que no me interesaba, pero que el capricho y el vicio lo hacía superior a la razón.
Dos y dos no son cuatro…por lo menos en este caso, sensaciones diferentes, en toda guerra hay un ganador y un perdedor, y yo no conquisté ningún reino de placer.
Él encantado, derrotado por el esfuerzo roncaba a mi lado como un bendito varón, yo….pues eso, con mi premio de consolación. 
De pronto promesas y susurros en la noche suspirando mi nombre me pusieron en tensión….¡¡¡¡¡lo que faltaba, ahora va y se cuelga por mí!!!!!!!! NO PUEDE SER…siempre pasa lo mismo, esta vez lo que no deseas se te pega.

Pasó el día. Yo asustada, intentando inventar alguna historia para retirarme del juego con elegancia, consulté a mis asesores, miraba preocupada el teléfono, uffffff que no llame!!!!!
Y sucedió, ya bien entrada la tarde recibo el mensaje…..

“Eres increible, lo pasé muy bien, GRACIAS”.

¿GRACIAS?....¿como una máquina de tabaco?..."su tabaco, gracias."
 No puede ser que después mi despliegue absurdo de encantos y sonrisas, de escuchar y asentir , de revolturas y sudores, me obsequie con un ¡GRACIAS!...todo glamour a la basura. Maldito Karma.

"y yo que me creía Steve Mcqueen" (sabina, medias negras)


nota del autor: ustedes queridos lectores pensarán, (sobre todo los hombres) que por qué me dolió tanto ese Gracias, si la presa no me interesaba, si ese gracias era realmente una liberación....pero amigos el Ego herido es la más terrible de las dolencias, sobre todo porque yo lo llevaba como un globo de feria.


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